HISTORIA BARRIO CHAMPAGNAT




La invasion del barrio Champagnat empezo a gestarse entre 1940 y 1950 y la Junta de Accion Comunal esta constituida desde 1976, La presencia de los hermanos Maristas, cambio radicalmente al sector la construcion y puesta en funcionamiento el centro educativo donde se forman centenares de jovenes de la ciudad de Ipiales, en el barrio se encuentran importantes entidades y centros educativos tales como: la Emisora Cultural Bolivar de Radio Viva. Estacion del Cuerpo de Bomberos Voluntarios, Institucion Educativa Ciudad de Ipiales, Cooperativa Supertaxis del Sur y la Estacion de Policia del barrio, segun los primeros pobladores cuentan que posterior a la infraestructura del colegio se construyo una casa en la carrera 1a C donde hacia las veces de  comvento de monjas, son varios los primeros  pobladores que pasaron por el barrio: Ligia de Guerrero, Regina Guerron, Elina Velasco, Felix Narvaez, Pedro Botina, Cervelion Guerrero, Gratiniano Hernandez Q. P. D.  otros  vecinos  como la Sra Maria Cecilia Rosero de Bucheli,  Hilda  Moreno, Herman Rosero, Flabio Usama recuerdan el paso de los avatares de un lugar  donde  la  mayoria  de las  familias que viven en el barrio son humildes y trabajadoras.

 

GALERIA DE FOTOS

LA ALCALDÍA A TRAVEZ  DE  EMPOOBANDO

 Y J.A.C. SE LOGRO PROYECTO DE ACUEDUCTO 

PARA LA CALLE 4ta

    REUNIÓN DE SEGURIDAD CON LA COMUNIDAD 

VIVIENDA DE LA SRA MARIA  CECILIA- CALLE 7A

GESTION DE SEÑALIZACION VIAL CALLE 12 CRA 1A



     

CON ISERVI SE LOGRO LIMPIAR

 EL CRECIMIENTO DE ALGUNA MALEZA 

LUEGO DEL TRABAJO ADELANTADO POR ISERVI

VISTA COLEGIO INTEGRADO CIUDAD DE IPIALES



PUESTO DE POLICÍA " CAI " CHAMPAGNAT

   

EL ALUMBRADO PÚBLICO PARTE

FUNDAMENTAL PARA LA

COMUNIDAD



CON INFRAESTRUCTURA SE LOGRO LA ADECUACION DE LA CRA 1A D



CON ISERVI SE LOGRO RECIPIENTES DE ASEO

MEMORIA DE UN SUEÑO: DATOS DE UNA  OBRA CUMPLIDA

SALON COMUNAL

Fueron 35 años de espera para que el barrio Champagnat  contará con un salón comunal.

Pues bien, me prestó a hacer memoria del sacrificio que pasamos  durante el desarrollo de la obra cumplida, no sin antes agradecer  a Dios,  a mi esposa e hijos que siempre me apoyaron en este proyecto, que siempre se pensó como un mejor futuro para el sector donde vivo.

Recuerdo que, después  de seis años, de haber llegado al barrio, nos dimos cuenta de un lote que estaba ubicado en la  calle octava junto al CAI de policía, lote que en el cual, hoy, nos servirá para mejorar las condiciones de vida de todos nosotros, los vecinos y amigos que vivimos en este sector.

Quiero compartir que nosotros llegábamos  de la Urbanización Álamos Norte donde, siendo el primer presidente de la Junta de acción comunal,  también habíamos aportado un granito de arena al gestionar la canalización de las aguas servidas, a través del gobierno municipal del médico Guillermo Enríquez Miranda, la construcción de cámaras de servicio telefónico,  la instalación de un teléfono publico ubicado en la entrada principal, el descapote del área donde existe el polideportivo, la obtención de las porterías y tableros para la práctica de baloncesto y microfútbol  gracias a la colaboración del doctor Javier Bastidas Paz Mino, director del ente municipal del deporte Ordepi.

El hacer gestión para beneficio de la comunidad, me  sirvió para seguir aportando con este barrio y en donde encontramos que la principal necesidad era contar con un Salón comunal, y de verdad que así fue, ver como un día jueves 22 de septiembre del 2010, siendo las dos de la tarde, a través de  un grupo de cuatro obreros comenzaron a edificar nuestros sueños y de la comunidad.

PENSAMOS EN ALCANZAR UNA META

Siempre es posible hacer esfuerzos extra para alcanzar una meta. Porque no hacerlo para servir mejor a los demás teniendo en cuenta que el valor del sacrificio es aquel esfuerzo extraordinario para alcanzar un beneficio mayor venciendo los propios gustos intereses y comodidad.

Claro, debemos tener en mente que el sacrificio, aunque suene drástico el término, es un valor muy importante para superarnos en nuestra vida por la fuerza que imprime en nuestro carácter.  De Compromiso, perseverancia, optimismo, superación y servicio.  Valores que se perfeccionan a un mismo tiempo, por todo eso el sacrificio no es un valor que sugiere sufrimiento y castigo sino un frente de crecimiento personal

Por eso valió la pena hacerlo y lo hicimos. Porque todo aquello que vale la pena, requiere de sacrificio. Pues querer encontrar caminos fáciles para todo, sólo está en la mente de personas con pocas aspiraciones.

Quien vive el valor del sacrificio va por un camino constante de superación. Haciendo el bien en todo lugar donde se encuentra. La persona orientada hacia el logro persiste y lo intenta una y otra vez hasta que lo logra.

De ahí que, siempre pensábamos en triunfar en lo que nos habíamos propuesto, conseguir aquello que queríamos para el barrio, con ese propósito me motive para actuar y asumir hacia el logro, con el deseo de alcanzar la meta y ver construido un salón comunal.

ASÍ NACIÓ LA IDEA DE CONSTRUCIÓN

Las asambleas de vecinos, en diferentes ocasiones, se realizaban en los salones de clase del colegio Champagnat, pagando por el préstamo entre diez mil o  quine mil pesos para una o dos horas que duraba  la  reunión, en otras ocasiones nos reuníamos en el salón familiar del Señor Herman Rosero Guevara, quien con su generosidad que  lo caracteriza  brindaba a los presentes desde un  tinto, hasta una aromática o un dulce, también  las casas de los vecinos Flavio Usama y Alicia Chamorro.

El objetivo de las asambleas era para  dar a conocer las buenas y nuevas noticias para entregar a la comunidad, quizás en estos encuentros de vecinos en la primera asamblea que adelantamos en la casa del señor Flavio Usama nació la idea de construir el salón comunal, la cual fue aceptada y para ello se había determinado hacer la marcha del ladrillo con la participación de los colegios Champagnat y ciudad de Ipiales, además de la realización de varios eventos culturales y de un aporte económico voluntario que puedan entregar los moradores del barrio, a través de una actividad de puerta a puerta o de una comisión  integrada por los señores Nuri Cisneros, Clara  Moran y Gualterio Rosero quienes al final lograron la suma de un millón cuatrocientos noventa y cinco mil pesos.

En ese momento, todo parecería ser fácil para nosotros porque mirábamos en la mayoría de los vecinos mucho entusiasmo por cumplir dicho propósito, pero todo comenzó a desvanecer, cuando al solicitar los requisitos para obtener la licencia de construcción nos dijeron que  había que cumplir con los  paz y salvos del municipio por los conceptos de impuesto predial del lote que superaba el millón de pesos y por el concepto de pavimentación  de la calle y carrera donde se encuentraba ubicado el lote. Este paz y salvo debía ser otorgado por  la oficina de valorización municipal que superaba los catorce millones setecientos mil pesos.  Deudas que habían dejado de ser pagadas por las anteriores juntas y que de las cuales solo teníamos conocimiento de la primera.

Fue entonces cuando pensamos en buscar  colaboración y apoyo de  parte de la administración municipal para que a través de las reuniones de concertación que adelanta la alcaldía con los barrios de Ipiales se tenga en cuenta al barrio Champagnat y para ello tuvimos que cursar la respectiva invitación.

REUNION CON ALCALDE

La  construcción del Salón Comunal se cumple en el gobierno municipal del Sr Hernán Gustavo Estupiñan Calvache, quien por invitación de la Junta de acción comunal en  una reunión de concertación desarrollada el 24 de marzo de 2009, en el salón de actos del colegio Champagnat, se dio a conocer las necesidades más sentidas del barrio como Pavimentación de varias calles, señalización de la carrera 1ª, habida cuenta que en esa vía se encuentran las institucciones educativas Champagnat y Colegio Ciudad de Ipiales, Polideportivo y un salón comunal. Para escuchar los planteamientos del barrio participaron, en su orden, mi persona como presidente, los señores Libardo Herrera Recalde,  Serbio Tulio Rosero Ituyan y el Dr. Marcial Montenegro Aza, personas que por su mayor tiempo de residencia y conocimiento del  barrio se  dirigieron  al alcalde Gustavo Estupiñan acompañado de la totalidad de Secretarios y gerentes de las entidades centrales y descentralizadas del municipio periodo 2008 – 2011

Entre los funcionarios estuvieron presentes  el arquitecto Javier de la Carrera Bravo Secretario de Planeación, Manuel  Daza Secretario de hacienda;  Andrés Martínez  Asesor Jurídico; Dr. David Chalapud Enríquez, Secretario de desarrollo social

Habiendo escuchado los planteamientos de los voceros del barrio  tomó la palabra el Señor alcalde Gustavo Estupiñan manifestando que había escuchado atentamente las necesidades del barrio y que la administración podría fijar presupuesto para una.

Hago uso de la palabra para recordarle al señor alcalde  que su compromiso en campaña  electoral,  de manera personal, fue la construcción de un salón comunal  que se construirá  en un lote que esta junto al puesto de policía, una vez más  toma la palabra el alcalde para manifestar a los presentes que es imposible la construcción porque el  predio lo habían  donado la  junta directiva del barrio a la Policía Nacional mediante una acta de entrega que reposa en la estación de Policía.

Sobre el tema  se dirige la Capitan Mónica Santa Cruz, comandante del primer distrito de policía,  quien  afirma y asegura que el lote del cual se está tratando en realidad fue  donado a la entidad oficial a través de un documento “acta de entrega a través de la señora Esperanza Guerrero, presidenta de la junta directiva en ese entonces.

Fue una noticia que cayó como un baldado de agua fría a los presentes quienes  asombrados, por lo que se había hecho,  se miraban del uno al otro. Entonces, vuelvo a hacer uso de la palabra para  manifestar que únicamente  el Certificado de Libertad y tradición es quien diga a quien de verdad le pertenece el lote,  para ello las autoridades nos dieron un plazo de ocho días para demostrar lo que estamos reclamando y fue necesario radicarlo en la Secretaría de Gobierno Municipal, además de dejar en claro la situación que reclamaba  la policía por posesión de 25 años.

Fue entonces cuando me propuse  con  firmeza y fuerza  continuar, al día siguiente, demostrarles que no estábamos equivocados  en que el predio  pertenece al barrio a trevés del documento (Certificado de libertad y tradición ) para ser indicado al secretario de gobierno Dr.  Darío Pantoja, donde estuve acompañado  por los señores: Julio Obando Secretario de la Junta y el Dr. Marcial Montenegro  Aza, vecino.

Posteriormente, al siguiente día,  nos dirigimos  con el profesor Libardo Herrera Recalde, Dr. Marcial Montenegro y el Ingeniero, hasta el comando de policía para tratar los dos temas que reclamaban. Nos encontramos con la noticia de que se había presentado relevo de comandante, se había ido Mónica Santa Cruz y había llegado el mayor Néstor Josué Luna Gómez quien, por cierto, apenas se enteraba de la situación y para ello necesita trasladar la consulta al departamento de Policía Nariño, para ello solicito un tiempo prudencial de ocho días, así volvimos y de manera cordial, nos  confirmaron que el lote, que reclamábamos, efectivamente, pertenecía al barrio.

Entonces, con mucha humildad y  responsabilidad de aportar y tratar de dar todo, volvimos a golpear  las puertas de la administración municipal,  para que lo que había prometido el Alcalde se cumpliera. Le recordamos nuestro propósito de fijar los recursos necesarios para la construcción de un salón comunal; recuerdo que, el señor Gustavo Estupiñan, en su despacho nos solicitó, en el menor tiempo posible, cumplir con una serie de documentos para ser resueltos con la comunidad del barrio:

• -      Acta de asamblea por los   habitantes  que se encuentren legalmente registrados y afiliados en el  libro de la junta, como constancia de autorizar la construcción del salón comunal.
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• -       Paz y salvo de impuesto predial del lote

• -       Paz y salvo por el concepto de  valorización por  pavimentación de las vías donde se encuentra el lote que superaba los catorce millones cuatrocientos  mil pesos.

• -    Paz y salvo de servicios públicos  de energía y agua donde funciona el puesto de policía, CAÍ,  de diez millones de pesos. Otro obstáculo más continuar haciendo gestión con las autoridades del municipio y por el departamento de policía Nariño, afortunadamente lo superamos y esos documentos solicitados por la administración municipal se pudieron radicar en la oficina jurídica.

Qué bueno hacer un paréntesis,  reconocer el espíritu de colaboración de algunos vecinos que creyeron y  no dudaron  dos veces en apoyarme con  la gestión, cuando más  necesitaba  para  el pago de todo trámite de documentos como:   certificado de libertad y tradición,  paz y salvo del municipio entre otros,  de ello doy gracias a los vecinos Herman Rosero Guevara, Irma Melo, Alicia Chamorro, Luis Castro, , Rosa Rivera, Cecilia Díaz, Judy Bernal Palacios, Martha Realpe, Alba Jurado, Marcos Urbano, Edgar  Cuastumal,  Paola Rosero Huertas, Anita Arroyo, Flavio U sama, Nieves Chilanguay, Luz Angélica Revelo,  Rosita Acosta, Rubiela Narváez, Lucia Ortiz, Patricia Moreno, Cecilia Palma, Lorena Suarez, Omaira Cuasanchir, Edgar Rosero, Rubiela Cumbal, Cruz Ortega, Miguel Ángel Díaz, José María Mueses, Maruja Criollo, Olga Arévalo, Eduardo Montenegro, Jose Yaguapaz, Familia Oviedo Perez.

  ENTONCES…  MANOS A LA OBRA

Nos decidimos, primero que todo a convocar a asamblea general de habitantes que tuvo lugar en uno de los  salones de clase del colegio Champagnat, para ello  se pago diez mil pesos de  alquiler del salón, dicha  reunión  se convocó para dar la buena noticia de que la construcción del salón comunal había empezado el día 10 de septiembre del 2010, bajo la dirección del Ingeniero Arturo Montenegro quien por  licitación pública ganó la propuesta de construir el salón para el barrio, la  remodelación del CAI y construcción del puesto de policía en el corregimiento de la Victoria.

Que importante manifestar que el lote  donde se iba a construir el salón, lo donaron las directivas de la  comunidad marista, siendo  rector el hermano Félix Rengifo Reina q. p. d. Habiendo transferido el  predio a la junta de acción comunal de ese entonces,  que estaba representada por el profesor Manuel Antonio Reina,  Presidente y docente del  Colegio Nacional  Sucre.

Un Lote con una área de 275 metros cuadrados donde en primera medida se había construido la infraestructura del CAI y a lado se hallaba el espacio exacto para construir un salón comunal, según escritura pública el acto de donación se celebró el 7 de abril de 1976 en la notaria 1ª de Ipiales, siendo notario el doctor Guillermo Montenegro Vela.

 Fundición  DE LOSA: la MINGA en el barrio

El día viernes 18 de noviembre del 2010, cuando eran las ocho de la mañana con quince minutos, se inicio los trabajos de fundición hasta las cinco de la tarde, fue un día lleno de optimismo y entrega, en el cual se concentraron varios vecinos para dedicar el tiempo necesario, desde las 8 de la mañana hasta las cinco de la tarde.

Reconozco a las personas que colaboraron  dejando de lado   sus labores cotidianas de atender  su trabajo particular  en el taller y  tienda, para trabajar como unos verdaderos maestros, pasando baldes de piedra, arena y agua hasta el sitio de fundición.

Gracias a las  Señoras  Sonia Pinchao, Irma Melo, Cecilia Díaz. Omaira Cuasanchir, Nuri Cisneros Edelimira Chilanguay, María Ilia Moran,  Alba Jurado, Señores Luis Castro, José Perenguez, José María Mueses, Flavio Usama, Jesús Yaguapas, Marco Tulio Yaguapaz, papa y hermano del vecino José Yaguapaz, Marcos Lagos, Luis Cuastumal. Armando Díaz Pinchao, José Ismael Hernández, Marcos Chilanguay, Guillermo Cuadros y Armando Oviedo que aparte de trabajar colaboraron con un aporte económico voluntario que sirvió para el refrigerio y almuerzo comunitario desarrollado en la casa del vecino José María Mueses.

COMISIONES DE ATENCION REFRIGERIO.

OBREROS

Muchos dicen que todo es posible con esfuerzo, dedicación, perseverancia y amor, valores que caracterizaron  a los vecinos que se acercaron a la cuadrilla de obreros llevándoles, cada día en horas de la mañana y tarde,  un café, una gaseosa, un jugo o un dulce.

Los vecinos que prestaron su colaboración desde el día 26 de septiembre fueron:  Irma Melo, Alicia Chamorro, Luis Castro, Rosa Rivera, Cecilia Díaz, Marcos Urbano, Luis Cuastumal, Maruja Criollo, Paola Rosero, Anita Arroyo, Flavio Usama, Nieves Chilanguay, Luz Angélica Revelo, Rosita Acosta, Olga Arévalo, Piedad Cuchala, Rubiela Narváez, Lucia Ortiz, Patricia Moreno, Cecilia Palma, Lorena Suarez, Edgar Rosero, Omaira Cuasanchir, Rubiela Cumbal, Cruz Ortega.

22 DE SEPTIEMBRE FECHA MEMORABLE

El día  22 de septiembre del 2010, considero como fecha memorable porque es  cuando se da inicio  a la construcción del Salón Comunal bajo  la dirección del maestro Rómulo Romo acompañado de los obreros Guillermo Pinchao, Segundo Chacua, Fernando Taimal y Hernando Quenguan, con ellos  empezó la tarea de descapote de lote, apertura de excavación de zapatas,  demolición de un muro de piedra y construcción de parrillas y columnas.

Con esos  trabajadores y otros  que a lo mejor  no aguantaron el ritmo de trabajo, la obra se  terminó de construir  el 19 de junio del 2012.

 INAUGURACIÓN

El acto de inauguración se cumplió el 29 de agosto del 2012, a partir de las 10 y quince minuto de la mañana, con la asistencia del alcalde Dr. Darío Vela de los Ríos, padre Manuel Chamorro Guerrero, Dr. Alfredo Apraez Folleco, Secretario de la oficina de Desarrollo Social, Ex alcalde Medico Guillermo Enríquez  Miranda, Capitán Armando Pineda cte. del distrito de Policía Ipiales, Javier de la Carrera Ex secretario de planeación, Mauricio Cisneros, gerente de la Empresa de Servicios Varios Iservi y de un centenar de vecinos que fueron testigos del acto de protocolo a cargo el Dr. Darío Vela de los Ríos con la entrega del salón comunal,  Armando  Oviedo en agradecimiento de la obra el padre Manuel Chamorro con la bendición

El evento fue transmitido por los medios radiales  de Radio Ipiales de Caracol, Emisora Cultural Bolívar y los medios televisivos de CNC, Ipisur canal cuatro RATV. Terminado el acto los invitados se dirigieron a  la casa de la señora Paola Rosero donde fueron se les ofreció un “almuerzo” que se logró a través de la colaboración económica de los vecinos, que siempre nos colaboraron en todo momento.

                                      

CRÍTICAS AL BUEN NOMBRE

No pudo  faltar la cizaña, calumnia y malos comentarios de los contradictores del barrio durante la construcción de la obra. Para ello les demostramos con la  suficiente capacidad intelectual y moral como se hacen bien las cosas, el trabajar honestamente, todo por el progreso social de la comunidad.

A quienes se encargaban de pasar  horas y horas  criticando hasta el mínimo detalle, en tergiversar la vedad de la obra, les dijimos  que esa forma  de criticar no era una fórmula de solución, ventilar la sarta de mentiras y aditivos, lo que están  buscando era acabar con la dignidad y el buen nombre de la persona que, día a día, se dedica  a trabajar por una causa social.

Penoso manifestarlo, pero si es  bueno decirlo, que quienes nos insultaron, criticaron y calumniaron llegaron hasta las autoridades competentes como la  Inspección de Policía y Fiscalía para que dejaran de nombrarnos, pero fue así, en muy poco tiempo de haber llegado al barrio, con algo hemos contribuido al desarrollo de este hermoso lugar, tal vez con la denuncia  se pudo callar la boca de esos personajes que no hacen ni tampoco dejan que hacer.

NOS ATREVIMOS A SOÑAR EN GRANDE Y LO CUMPLIMOS

Finalmente, hago un recuento de lo que esta experiencia nos dejo. La que, hace cuatro años 2008 y 2012, como presidente de la junta de acción comunal se tuvo que afrontar

 Experiencia llena de dudas y con mucha incertidumbre pero que, con el paso del tiempo, encontré respuesta para cumplir con un objetivo más en mi vida. Tal vez, mi profesión de periodista, me sirvió bastante para poder llegar hasta las autoridades y cumplir con mi sueño.

Me voy muy contento y satisfecho por el deber cumplido con mi comunidad, claro que iniciamos con expectativas muy altas, puedo decir que no solo las cumplimos, sino que las superamos.

La gente deposito en mí,  su confianza desde el principio cuando me eligieron como presidente de la junta de acción comunal; recuerdo que quienes pensaron en nosotros fueron los vecinos José María Mueses y Yaneth  Manríque, en una tarde en la que se encontraban adelantando la convocatoria a los vecinos para elección de la nueva junta, desde ese momento ya venían anunciando mi nombre.

 Yo creo que, cuando alguien pone en ti su confianza, no puedes defraudarlo, al contrario te sientes obligado a dar más de lo mejor que tienes dentro, y creo que esa fue la clave para alcanzar los objetivos que nos propusimos.

Palabras de agradecimiento, no solo para aquellos que confiaron en nosotros desde el primer momento, cuando me designaron como presidente en asamblea de habitantes, que tuvo lugar en uno de os salones del colegio Champagnat, sino para los que decidieron acompañarnos y respaldar con este reto, cuestión que nos permitió encarar con mucha fortaleza todos los retos que demandaron. El trabajo no se hace solo, se hace en equipo.

La construcción del Salón Comunal fue, tal vez, un proyecto muy ambicioso que al principio la comunidad no lo dimensiono o que, a veces, costaba trabajo en creer que fuera a realizarse,  “Incrédulos”. Pero me voy con esa satisfacción, que si nos atrevimos a soñar muy alto y lo logramos. No se compara a lo que realmente sucedió, a veces hasta un poco en tono de broma, digo que, si Yo hubiera sabido a lo que me iba a encontrar y enfrentar, quien sabe si hubiera dicho que si.

Claro que hubiera dicho que no, pero a lo que voy es que uno tiene una idea de lo que pueden ser las cosas y la vida te sorprende.

Hubo altas y bajas, mucho más altas, también la comunidad tenía una expectativa de lo que podíamos hacer, sabiendo que habían pasado juntas directivas que llevaban años y años existiendo, pero al parecer creo que no había tenido tanta fuerza o no había sumado tanto. Me atrevo a decirlo así por la importancia del barrio y que por mucho tiempo venía reclamando la  necesidad de tener un salón comunal.

Creo que eso fue clave para que nosotros pudiéramos trabajar por un bien social para mi comunidad, un legado que sirva como ejemplo en la posteridad.

Con mucho gusto

Armando Oviedo Rosero

Presidente JAC periodo 2008 – 2012.